martes, mayo 22, 2007

¿Para qué sirve una fotografía?


¿De qué me sirve un instante congelado en el tiempo?
Algo que no podré recuperar y que sólo obedece a un impulso pasajero, del que nada efectivo permanece.
¿Para qué recordar un momento que nada significa y que no refleja más que una impostura forzada?
Rostros que ya no existen, lugares inhóspitos en los que nada de nosotros queda, sin relieve ni olor, rodeados de siluetas sin nombre.
Tan falso como un gesto a destiempo.
Tan inútil como los propios recuerdos.

12 Comments:

At 1:12 a. m., Blogger Noviembre todavía said...

Esta vez no estoy de acuerdo contigo... los recuerdos... son lo que nos hace ser como somos.

Soy borde por cómo me trataste.
Soy amable porque recuerdo a mi madre siempre con una sonrisa en los labios.
Te ayudo a levantarte porque recuerdo que otros lo hicieron por mi.
Me escondo porque recuerdo el daño que me han hecho.
Miro las estrellas con cariño porque me recuerdan esos veranos.

Borra un recuerdo, uno de los que duelen, o uno de los que te hacen sonreír... ¿Serías igual si no te acordaras de eso?

 
At 8:39 a. m., Blogger Tyla said...

Pues sí, sin los recuerdos no seríamos igual. Pero a veces son un lastre demasiado pesado. Yo casi preferiría empezar de cero cada mañana.
¿Tampoco estás de acuerdo en que las fotografías son la plasmación de algo que no existe y que no sirve para nada? ;)

 
At 5:10 p. m., Blogger Qué fue de BabyJane said...

A mí me sirven,a veces para llorar, otras para reír...Soy incapaz de vivir sin miles de recuerdos.

 
At 11:38 p. m., Anonymous Anónimo said...

Sí sirven... claro que sirven...
Para ver con perspectiva con la ventaja del tiempo transcurrido. Para comparar. Para volver a ver a personas a las que no quisimos perder de vista pero, por el motivo que fuera, perdimos. Para recordar. Y a veces, hasta para adorar...

 
At 12:11 a. m., Blogger Noviembre todavía said...

Mmmm... no... tampoco estoy de acuerdo... lo siento...

Encima de mi mesa de estudiar tengo una foto, justo delante de los apuntes, para verla sin apenas levantar la mirada. Y no imaginas lo que me relaja esa sola imagen.
Tra el recuerdo de tiempos amables, de personas a las que quiero, de un lugar que tengo que volver a visitar.
Y las fotos suelen devolvernos siempre momentos alegres, no retratamos la tristeza, sino la felicidad.
A mi sí me gustan las fotos.

 
At 2:36 p. m., Anonymous Anónimo said...

Yo las uso para atesorar momentos, pequeños cuadros que recogen solo un segundo y que se pueden mirar durante horas.
Al hacerlo echo en falta esa tercera dimension, lo ya vivido que no se recupera aunque se sobreviva.

Para mi las fotografias son la lengua fuera del "tempus fugit". Lengua fuera porque corremos tanto que se pierde el aliento, lengua fuera porque es mi gesto irónico-simpático preferido y lo hago mucho.

Hoy te saco la lengua desde aqui, con una sonrisa.
Me encanta tu blog y si no tuviera que salir corriendo a currar me lo leeria entero, mmm... has escrito mucho y muy bien, voy a tener mucho para mi solaz cuando este sola, con todo el tiempo que escapa.

Hay gente que tiene el vicio (o lo llaman hobbie) de observar el vuelo de los pajaros, nosotros compartimos el vuelo de las páginas.
No dejes de volar, ahora que empiezo con la "ornitylagia" ;) ... por cierto, estoy escuchando "Ornithology" de Parker, seguro que te gusta.
Un abrazo cyberdarkiano, :P

 
At 6:38 p. m., Blogger Tyla said...

Supongo que lo malo de escribir algunas cosas en momentos arrebatados tiene estas cosas... que al cabo de los días pierden parte del sentido que tenían. A mí me encanta regodearme en los recuerdos, acariciarlos, revivirlos... pero sigo pensando que las fotos tienen un carácter de falsedad que las hace inútiles. Ese momento que atrapas, es tan fugaz que no llega a tener sentido si no lo reinventas tú después. Y entonces, ya no es lo mismo. Ah... mis paranoias y yo.

 
At 2:18 p. m., Anonymous Anónimo said...

Pues espero que no tengas razón, porque por ahora, me dedico a eso.

Para mi las fotografñías son los recuerdos con mayúsculas. El sentimiento atenuado y ellas, es lo único que me queda de todo lo que una vez pasó. Además de un modo de ganarme la vida.

Cuando te he leido, me ha dado la sensación de que, a lo que te refieres realmente, es al miedo de enfrentarse a una fotografía. ¿No os ha pasado que, mirando su cara captada en ese instante detenidamente, te aparece todo su fantasma? Es como si se saliera del papel para ahogarte.
A veces sólo se conforma con mirarte de forma irónica.
Y nunca se sabe qué es peor..

Él, ella... Todos lo hacen.

¿O es que soy yo, que me he vuelto loca?

 
At 10:38 p. m., Blogger Tyla said...

Las caras, el paisaje, el momento retratado. Todo vuelve y generalmente para hacer daño, de un modo u otro. Es como si esa imagen se empeñase en mostrarte todo lo que has perdido. Y duele mucho más que una imagen mental, porque no admite autoengaño.

 
At 12:49 a. m., Anonymous Anónimo said...

Según el caso. También puede recordarte todo lo que has ganado.

 
At 9:50 p. m., Blogger Maybellene said...

Los recuerdos permanecen porque son todos esos pequeños peldaños que hemos ido subiendo, con esfuerzo... y que vemos cuando volvemos la vista atrás, algo tan inadecuado a veces como necesario.

Sin recuerdos no somos nada, ni nadie... ellos son las células del alma...

Un saludo.

 
At 3:30 a. m., Blogger Ale Seijo said...

hacer de la vida una secuancia de perfectas fotografias...

 

Publicar un comentario

<< Home